Vuelve la plaza del Mercado a recuperar su aspecto original y, sin embargo, nunca el adoquinado espacio volverá a ser el de antes. Ni la plaza ni los que nos hemos ido acercando por allí. Han sido 50 días de acampada en los que Asamblea Logroño ha venido a demostrar que la ciudadanía estaba mucho menos anestesiada de lo que parecía y que bastaba que alguien prendiese la chispa para… solo el tiempo lo dirá.
El campamento se levanta, sí, pero el movimiento sigue… Pacífico, abierto y horizontal como asamblea a asamblea y acción a acción se ha venido confirmando.
En mi memoria quedan como el 15 de mayo alrededor de un centenar de personas se daban cita en la Concha del Espolón sin saber muy bien para qué desembocando unos días después en una sentada ‘vía redes sociales’ que tomaba forma de acampada ‘asamblearia’. Y en la de los logroñeses permanece como el 11 de junio se dio la ‘bienvenida’ a la nueva Corporación municipal para, una semana después, hacer toda una exhibición de fuerza con una ‘macromanifestación’ como las que no se recuerdan en la ciudad de Logroño.
El 15M no solo tiene vocación de continuidad sino que la misma es una realidad de hecho. No están las tiendas pero están las personas, el debate y las propuestas de aquellos que quieran ser actores del cambio. Lo de la ‘Democracia Real Ya’ no tiene marcha atrás…
P.D.
Adjunto el enlace a un artículo de Irene Lozano que, si bien está extraído del Diario SUR, hoy domingo también ha podido leerse en Diario LA RIOJA: #Rubalkba