Dudas… tengo dudas. ¿O debería decir tienen? Al fin y al cabo hablo por boca de los vecinos, de los de avenida de Burgos que ya se empiezan a plantear si la primera fase de la remodelación urbanística que ahora sufren (aunque entienden) tendrá continuación con una segunda (cuya demora dejarían de entender), y de los de Logroño en general que viendo la altura del muro del soterramiento que se está levantando entre el puente de Vara de Rey y el de República Argentina (justo en la zona del derrumbe) ya empiezan a cuestionarse aquello de la ‘cota cero’.
Dudas… tienen dudas. Interrogantes que se traducen en incertidumbres y que si en el primero de los casos corresponde al Ayuntamiento de Logroño despejar incógnitas, en el segundo, con muchos más responsables, la respuesta depende nada menos que de hasta tres administraciones. Durante la semana que acaba los diferentes colectivos me han planteado sus preguntas y yo, humilde periodista, me he comprometido a trasladarlas. Es lo mínimo que puedo hacer ante mi falta de respuestas.