“Toda la gente que ha apoyado, todo el esfuerzo realizado, sin recursos, obteniendo el éxito que hemos obtenido… aunque sea una excepción es que… ¡leches, se puede, sí se puede!”. Voz entrecortada de la alegría, casi sin poder articular palabra por la emoción… Si hay gestos que lo explican todo, las lágrimas de Irene Martínez, ‘alma máter’ de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca en La Rioja y, por qué no decirlo, nuestra Ada Colau -con permiso de Aurelio, María Jesús, Claudio, Blanca, Helga, Carmen…-, visualizan como nada la importancia de lo conseguido, una victoria parcial del conjunto de la sociedad civil.

La admisión a trámite de la Iniciativa Legislativa Popular (ILP) contra desahucios para la que se han recogido 1.402.854 firmas -19.099 en La Rioja- cuando los peores presagios amenazaban con confirmarse, hizo que de la indignación se pasase al júbilo y el entorno de la PAH siguiese en la brecha. La misma que les ha llevado a conseguir una serie de logros fruto del trabajo incansable, la entrega desinteresada y el compromiso con la situación que nos ha tocado vivir. Que si una línea de ayudas específicas al alquiler del Ayuntamiento de Logroño, que si un servicio de mediación del Gobierno de La Rioja, que si… el reconocimiento del Foro Cívico ‘Francisco Sáez Porres’ en forma de premio ‘Justicia y Solidaridad’.

Puede que la toma en consideración la ILP impulsada por la plataforma no signifique más que eso, que será tenida en cuenta y se debatirá… lo que no es poco. La dación en pago, la paralización de los desahucios y el alquiler social han ingresado en el Congreso por justicia, sí, pero sobre todo por Democracia, con mayúsculas.

Irene, primera por la derecha. / Justo Rodríguez