La protesta ciudadana de la que se hicieron eco Diario LA RIOJA, larioja.com y Nanay de Logroño ha sido escuchada. Ayuntamiento de Logroño, Aulosa y CERMI alcanzaban ayer un compromiso unánime para colaborar en pro del correcto funcionamiento de las rampas de los autobuses urbanos después de que la pasada semana las redes sociales se movilizasen ante el caso de Sandra Peña, paralímpica que no pudo acceder a ninguno de los cuatro autobuses de la línea 9 y tras esperar más de una hora en Las Norias se veía obligada a volver a casa en su silla de ruedas.
Un compromiso que se verá traducido en un paquete de medidas que garanticen el acceso de personas con discapacidad al servicio de transporte urbano, y que además de velar por el buen funcionamiento mecánico de las rampas se ocupará de esos «múltiples factores» -puestos de manifiesto tanto por el concejal de Movilidad como por el responsable de la concesionaria del servicio- que influyen a la hora de que las mismas se puedan desplegar o no para su normal uso.
Seguir leyendo la noticia en larioja.com