Y sin siquiera celebrar el tercer cumpleaños, llega el cuarto. Y aquí seguimos. Sí, queridos amigos (y enemigos), como lo oyen: estamos de celebración. Nanay de Logroño, su Nanay, cumple cuatro años. Camino de los mil post y de los muchos más comentarios.
Si bien es cierto que los últimos 12 meses no han sido los más prolíficos de estas crónicas ‘majas’ de ciudad, un año para olvidar por unos u otros motivos, aquí estamos. 2013 no ha sido fácil en lo personal, y eso se ha dejado sentir. No tendrían por qué haberlo notado, pero…
En cualquier caso, sobrevivimos para contarlo, sí, y además nos quedan ganas para seguir haciéndolo. Seguimos en la brecha y eso es lo importante. Yo me quedo con eso… Un 15 de marzo, y ya van cuatro, en el que nuevamente renovamos el compromiso de continuar dándole a la tecla como mínimo otros tantos más. Créanme que al menos se intentará. Y al que no le guste que no lea… o sí, que para eso este es un espacio abierto a todo y para todos. Se aceptan y aceptarán sugerencias…