Dos mujeres y un mismo destino: conseguir convertirse en alcaldesa de su pueblo. Pilar Fernández Pardo, de Gijón, y Cuca Gamarra, de Logroño, tienen como poco dos cosas en común: ambas son ‘cabeza de lista’ del Partido Popular para las próximas municipales y ambas aspiran a hacerse con el bastón de mando de sus respectivos ayuntamientos en detrimento de sendos bipartitos (PSOE e IU en el caso de la primera y PSOE y PR en el de la segunda).
De momento, Fernández Pardo y Gamarra son concejalas de la oposición, portavoces del Grupo Municipal Popular hasta el próximo 22 de mayo como mínimo en el Ayuntamiento de Gijón y de Logroño, respectivamente, y candidatas a la Alcaldía tras no pocos dimes y diretes sobre su idoneidad para tal cargo.
Desconozco si Pilar y Cuca se conocen, aunque es probable que la una y la otra hubiesen entablado amistad en algún acto de partido, reunión de alcaldes o aspirantes a serlo o en cualquier otro tipo de encuentro organizado entre munícipes del PP… “¿Qué tal, Pilar?”, le saludaría nuestra Cuca. “Pues algo peor que tú, que para eso eres de la que dicen mejor ciudad de España para vivir”, respondería irónica la asturiana.
Desconozco hasta qué punto la una se siente identificada con la otra, aunque no sería complicado que salvando la diferencia de edad existente entre ambas Pilar sienta cierta envidia sana de Cuca. “¡Mírala que maja, tan joven y a puertas de convertirse en alcaldesa!”, pensará Fernández Pardo de Gamarra.
Desconozco si sus métodos coinciden y si la campaña electoral de una y otra transcurrirán paralelas hasta confluir en la meta final: la Alcaldía; la de Gijón en un caso y la de Logroño en el otro. Eso sí, lo cierto es que Fernández Pardo ha tomado la delantera a Gamarra subiéndose al carro de la denominada ‘política pop’, una ‘americanización’ de los actos públicos de partido con música y actuaciones en directo importada por el PP vasco.
Algo similar ha sucedido en el PP catalán, donde el candidato a la Alcaldía de Tarragona por los populares, Alejandro Fernández, ha saltado a la fama tras ponerse en manos de Lady Gaga y versionar el ‘Alejandro’ de la reina del pop.