– ¿Autodidacta?
– Totalmente. Empezamos en esto del grafiti antes de acabar
– ¿Y hay facilidades para llevarlo a la práctica?
– Hay muchísima policía… ¡Parece increíble lo controlados que nos tienen! Vamos, que me atrevería a decirte que resulta más sencillo pintar a las tres de la tarde, a plena luz del día, que a las 2 de la madrugada…
– ¿Tanta policía hay?
– ¿Qué si tanta policía hay? (‘The Bomber’ mira cómplice a ‘Mugre’) Un día te vienes con nosotros y lo compruebas… Hay persecuciones con porra incluida…
– Hablando en serio, ¿te han pillado alguna vez y ha terminado en denuncia?
– La cosa no está para bromas… En una ocasión me quisieron poner 3.000 pavos de multa. ¡Increíble! 3.000 pavos por pintar. Y eso fue lo que le dije al poli: “¡Joder, que es un spray, no una pipa…!”
– Vamos, que no está el asunto como para salir a pintar a diario…
– Pintar a diario, no; pero dibujar… eso si que sí. Pintar de lunes a domingo es complicado si tienes en cuenta que no hay ni muros ni pasta para comprar material ni… bueno, y con la policía vigilante para calzarte una buena multa…
Llegados a este punto de la conversación, el compañero de R. aboga por que ‘liberalizasen’ la autopista, pero no en el sentido que vienen discutiendo los políticos, sino para que los grafiteros de la ciudad pudiesen dar rienda suelta a su imaginación sobre los altos muros de la circunvalación de Logroño o LO-20.
–
– ¿Sabéis que el Ayuntamiento prepara una Ordenanza Cívica que perseguirá prácticas como las del grafiti o cualquier tipo de pintada?
– Sí, lo sabemos.
– ¿Y qué pensáis de ello?
– Que si ahora nos están dando por el culo, con la ordenanza de la que hablas aún nos van a dar más…
P.D.
Parte del grafiti ubicado en una de las esquinas de la plaza Monseñor Romero con la vieja estación de ferrocarril como elemento central (la foto también es de Miguel Herreros)