Golpe muy duro. Tan duro como inexplicable por muchos motivos. Y no sirve esconderse tras un penalti dudoso y una nueva expulsión para estudiar. Influye, pero no hay que pensar que lo decide todo. Aun así y después de perder 3-0 en Guijuelo ante un rival que se permite tocar de tacón todavía se pueden extraer aspectos positivos. Bueno, sólo uno, pero de amplio significado. Pepe Calvo ya conoce perfectamente cómo compite este equipo, cuál es el comportamiento de los jugadores en competición. Pocas dudas quedaban, pero para un desconocedor de la situación como Calvo ayer se pudieron mirar cara a cara todos en el vestuario pero sin caretas.
No recuerdo que un entrenador debute en plena temporada con una derrota como ésta y, sobre todo, con un juego y comportamientos como los de ayer. Les invitó a escuchar de nuevo a Sergio Moreno en Punto Radio Música y Deportes. Se puede perder, pero caer consciente de que el rival es mejor, de que te has dejado todo sobre el césped, de que no has podido hacer más. Pero cuando la apatía se adueña de la mente… El cuerpo es un perro y cuanto menos hace menos quiere. Este equipo hubiera sido capaz de firmar este partido con Martín en el banquillo. Da igual que estuviera Pepe Calvo y de que exteriorizara sus buenas sensaciones ante el duelo. Da igual. Hay cosas que escapan al entrenador. Lo dijo Martín en su despedida. Una vez que no estuviera él no había lugar a excusas dentro del equipo. Ayer se comenzó bien. El penalti y la expulsión alteran a cualquiera, pero con una hora de juego por delante se puede morir con las botas puestas. Guión idéntico al escrito días atrás en Vitoria. Incluso en la ausencia de reacción, pero con la salvedad de que los rivales son muy diferentes y de que el responsable (el técnico) es diferente. Entonces, ¿qué falla? ¿cuáles son los problemas de este equipo? Mientras no se localicen no se podrán extirpar. Toca pensar ya en el Zamora. No en ascender. En el Zamora. Nada más. Recibir el equipo con una ovación, alentarle durante los noventa minutos. Luego, cuando acabe, que sea lo que Dios quiera. Primero, apoyo. Es una obligación.

P.D. Me alegra haber escrito estas líneas antes de escuchar lo que dijo Sergio Rodríguez después de este partido. Me alegra coincidir con él en bastantes impresiones. Así que sumó a lo anterior lo que apuntó el centrocampista riojano.

“Hay que mirarse a la cara y no pensar en el play off”

A Sergio le tocó el difícil papel de dar la cara ante la prensa para explicar las sensaciones que se viven dentro del vestuario. «Somos conscientes de que ahora nosotros estamos señalados por la afición y puedo prometer que el trabajo por parte de todos está garantizado, que más esfuerzo casi es imposible, que todos estamos involucrados al máximo, que no se puede dudar de estos chicos…».
Sin embargo, los resultados no salen. «Y eso lo tenemos muy claro. Algo debemos cambiar porque esta línea no es positiva. La solución la desconocemos, más trabajo y quizás es el momento de no pensar tanto en play offs y ascensos y toca analizar la situación y ganar cuanto antes y de una vez un partido». Y, ¿por dónde se puede empezar? «Creo que debemos mirarnos todos a la cara, en el interior del vestuario, y poner la realidad sobre la mesa, valorarla entre todos y a partir de ahí comenzar a crecer». A pesar de todo esto, coincidió con su técnico en la explicación del resultado: «El penalti y la expulsión lo ha cambiado todo de nuevo».