La UD Logroñés seguirá una temporada más en Segunda División B después de empatar en Las Gaunas ante la SD Logroñés (1-1) y gracias también al empate que protagonizaron Zaragoza y Teruel (1-1) y que les deja a ambos con 38 puntos, a cuatro de los hombres de Raúl Llona, que suman 42. Una salvación agónica y que invita a una profunda reflexión en el club de Félix Revuelta, que demanda una remodelación interna más que profunda.
La UD Logroñés parece dispuesta a darle emoción a su vida. Iturralde falló una pena máxima a la media hora. Moya fue expulsado en esa jugada por roja directa tras derribar a Ubis. El navarro mandó el balón a la madera. Fue Mario Barco el que marcó en el primer minuto de la segunda mitad y Toledo el que empató (minuto 72). Pero es que la SD Logroñés, a pesar de jugar con un hombre menos durante prácticamente una hora, no cejó en su empeño e hizo una vez más gala de una de us grandes virtudes: la pelea. Sufrieron los jugadores de Llona, que tiene por delante tiempo para pensar y sobre todo para remodelar una plantilla que ha completado un fracaso total, pues sus objetivos eran bien diferentes a los de salvarse con la ayuda de terceros.
La SD Logroñés cumplió. Su temporada es sobresaliente. Apostaba por la permanencia y la logró antes de tiempo. Cerrará la Liga la próxima semana en Las Gaunas, donde su afición le reconocerá el trabajo bien hecho. La UD Logroñés viajará a Sestao para poner fin a diez meses que no merecen quedar escritos en su corta historia.