Publicaba estos días El Norte de Castilla una entrevista con el riojano Álvaro Rubio, uno de los puntales del Valladolid. Los castellanos pugnan por el ascenso, si bien lo observan desde la tercera plaza, a cuatro puntos del Celta y a ocho del Valladolid. El logroñés no quiere que se hable acerca de que su presencia sea el hecho “diferenciador” entre la mala racha recién pasada y la buena recién presente. De momento, con él en el campo se han sumado 10 puntos de 12 posibles, se han logrado 9 goles y se han encajado cuatro. “Ya venía haciendo un buen trabajo desde principio de temporada y el juego ha sido siempre bueno. Si algo se caracteriza este equipo es porque entre quien entre en el once sigue haciendo las cosas igual». «Las cosas vienen así, hay que aprovechar las oportunidades y ahora estoy jugando partidos y estoy contento», explica el riojano, que ahora goza de la titularidad que se le ha venido negando.
El Valladolid suma tres victorias y un empate en los últimos cuatro partidos, si bien en esa relación se incluye un encuentro, frente al Recreativo, que no se jugó. «Ya veníamos haciendo buen juego, pero faltaba ganar. Era cuestión de tiempo porque gente arriba tenemos de sobra, con muchísima calidad, y sabíamos que las ocasiones las teníamos y que las íbamos a marcar. Estamos en un momento bueno, ojalá que los resultados sean como los del otro día, que es lo que esperamos todos, y es lo más importante, de aquí a final de Liga ir sacando los partidos», apunta.
Y sacar partidos se traduce en puntos. Con 58 en el bolsillo aún necesita mucho más para ascender. Restan once partidos, 33 puntos. Se habla de 80-82 puntos para subir a Primera. «No lo he calculado, prefiero ir partido a partido. Ya está. Si queremos meternos entre esos dos puestos de ascenso directo no sólo hay que ganar en casa, si no también hay que hacer cosas fuera», indica.