Título: Elementos
Autora: María Luisa Balda
Género: Poesía
Editorial Basarai, 75 págs.
La poesía es una terapia aconsejable –siempre para el escritor, a veces para el lector- que cura desamores y aleja hircocervos; y este factor saludable no depende de la calidad textual, sino que está más ligado a las emociones que suscita el poema. Por eso, siempre me acerco con respeto a un nuevo libro de poemas, como a éste, titulado “Elementos”, en el que María Luisa Balda se aproxima a las emociones de la vida cotidiana con una mirada, a veces serena, con el sosiego que produce el mar: “(…) Hoy se hace pedazos la imagen del mar / que guardaban mis párpados / y no escucho la voz que invitaba a bañarse en sus aguas (…)”, a veces desazonada por el paso del tiempo y su circularidad inevitable:”Con naftalina guardo cada prenda / en conserva tengo cada célula / y las medias ocultan / negras varices del tiempo (…)”.
En su lectura afloran las emociones habituales: los vaivenes del amor, la autodefensa ante el dolor espiritual, la soledad obligada del hombre –ese hombre que siempre muere solo- y la perplejidad ante el tiempo inclemente, que pasa y cambia la perspectiva de las cosas: “(…) las horas guardan reposo / y los minutos se amoldan / al relieve curvo de mi piel (…)”
En una lectura de poemas en el Ateneo Riojano, pregunté a un conocido poeta y crítico literario: “¿Dónde colocaría usted este libro de poemas?”. Y me contestó: “En esa segunda fila en la que estamos casi todos”. María Luisa Balda y yo, también.
“ALONSO CHÁVARRI”