El poco evangélico Jiménez Losantos | La plazuela perdida - Blogs larioja.com >

Blogs

alonsochavarri

La plazuela perdida

El poco evangélico Jiménez Losantos

Reconozco que tengo la, quizás mala, costumbre de escuchar la cadena COPE. Son apenas quince minutos, mientras desayuno, pero, día tras día, no dejo de asombrarme con el señor Jiménez Losantos; y no por el contenido, que tampoco es nada del otro mundo, en los tiempos que corren, sino por la forma, por los modales, por su manera de entender el «hacer amigos».

En el espectro político cabe casi todo, y en el de las ondas también, por eso el programa del señor Jiménez Losantos tiene su lugar, aunque el que ahora ocupa no sea el más adecuado. Siempre que se acaten las reglas democráticas -y este programa parece que las acata- hay un lugar para todo, y la derecha de la derecha debe tenerlo; otra cosa es que las intervenciones de este periodista sean perjudiciales para el devenir electoral del centro-derecha, que lo son, pero ese asunto no nos concierne, y parece que tampoco a él, en cualquier caso, si a alguien le concierne, poco puede hacer al respecto.

Lo que no acabo de entender es que este programa tenga acomodo precisamente en la COPE, que, no lo olvidemos, es una emisora de la Iglesia y debería fomentar lo que ella se supone que fomenta: el buen entendimiento entre todos, el sosiego, la tranquilizadora mano izquierda, el no generar crispaciones y odios innecesarios , es decir lo contrario de lo que hace el señor Jiménez Losantos. Porque el núcleo central de la doctrina cristiana se encuentra en las palabras del sermón de la montaña: «Habéis oído que se dijo: amarás a tu prójimo y odiarás a tu enemigo, mas yo os digo: amad a vuestros enemigos, rogad por los que os persiguen y calumnian, haced bien a los que os odian; si sólo amáis a los que os aman, ¿qué recompensa tendréis? » y este debería ser el lema de la emisora, no lo contrario: hacer enemigos, crispar al que piensa distinto, encender fuegos innecesarios , como hace el señor Jiménez Losantos; y es especialmente sonrojante que un comunicador, de la emisora de la Iglesia, sea llevado, por estos motivos, a los tribunales.

Ya he confesado, al principio, mi pecado de escuchar el programa de Jiménez Losantos, y espero que me sea perdonado, porque tengo dolor de corazón, hago propósito de enmienda, de no volverlo a oír, y esta columna es mi penitencia.

Temas

Por Jesús Miguel ALONSO CHÁVARRI

Sobre el autor


abril 2006
MTWTFSS
     12
3456789
10111213141516
17181920212223
24252627282930