Título: EPÍSTOLAS LÍRICAS
Autor: ARMANDO BUSCARINI
Género: POESÍA EPISTOLAR
Edita: EDITORIAL BUSCARINI
Es loable el empeño de los hermanos Marín en rescatar la producción de Armando Buscarini y, en este libro, hacen un buen trabajo de recopilación y edición, en pequeño formato, de la correspondencia –pedigüeña casi siempre- con Antonio de Lezama, aunque ya sabemos que Armando Buscarini, como dice el excelente poeta Luis Alberto de Cuenca en el prólogo de este libro, es “un autentico desastre”, cuyo principal mérito es haber sido personaje.
Como siempre que tropezamos con obras de Buscarini, lo mejor son los prólogos y, en este caso, además, el epílogo. En el pequeño primer prólogo Luis Alberto de Cuenca hace una interesante comparación entre lo que Buscarini es a la literatura y Ed Wood al cine, aunque yo creo que Wood no es tan malo como Buscarini.
El importante prólogo de Rubén y Diego Marín es un buen trabajo de acercamiento a la complicada y enfermiza personalidad de Buscarini, completa anteriores investigaciones sobre el autor de Ezcaray y presenta novedades de su producción epistolar y de su vida arrastrada. Especialmente interesante y novedoso es el panfleto que escribió contra los hermanos Álvarez Quintero, en venganza por haber dejado de socorrerle, sin duda agobiados por la pesadez enfermiza de Buscarini.
El epílogo de Penélope Ramírez es un pequeño recorrido por la vida y actividad periodística y literaria de Antonio de Lezama, con quien mantuvo esta relación epistolar Armando Buscarini.
En cuanto a los poemas de esta correspondencia con Antonio de Lezama, hay poco que decir: son indicativos del escaso talento y la deficiente formación literaria de Buscarini, a quien le ocurría como a Asurancetúrix, el bardo de Goscinny y Uderzo: “las opiniones sobre él estaban encontradas, él pensaba de sí mismo que era un genio; los demás creían que era un pelmazo”.
“ALONSO CHÁVARRI”