La barra del bar siempre ha sido un buen sitio para los periodistas. Sorprendido, como ya he manifestado en alguna ocasión, por el éxito de las cábalas quinielísticas sobre el futuro gobierno de Pedro Sanz, la penúltima cerveza que tomé el viernes trajo a colación esta ensalada y la apología del ‘chismorreo’.
Por supuesto pagué la ronda, ya que mi contertulio nocturno aportó un nuevo nombre que, a priori, goza de toda credibilidad para formar parte de la quiniela de los siete magníficos, incluso a mi juicio por delante del ‘consejerable’ tapado sanitario que trajo a la palestra el amigo Javi Campos: si recordáis, el actual director general de Recursos Humanos del Seris y ex presidente del CSI-CSIF, Javier Aparicio.
No me enrollo más e incorporo al anestesista Jesús Álvarez como candidato a esa nueva consejería que, parece tenemos todos claro, refundirá Salud y Servicios Sociales. Para refrescar la memoria, Álvarez, que mostró mano izquierda durante su gestión como gerente del Hospital San Millán y luego como gerente del Servicio Riojano de Salud, fue la última ‘víctima’ de Pedro Soto como consejero.
Jesús Álvarez tenía una clara proyección política, pero fue truncada de raíz por Soto, quien, de la noche a la mañana, le cesó en su cargo de responsable sanitario. Álvarez era considerado ya entonces un ‘hombre del presidente’ y, de hecho, la ‘amortización’ del anestesista fue la última decisión que tomó Pedro Soto como consejero.
Un día después, el propio ‘amortizador’ fue cesado fulminantemente por Pedro Sanz y a los pocos días ocupó su plaza José Ignacio Nieto con un claro encargo: recuperar las tensas relaciones con el colectivo médico.
Así las cosas, la fuente cervecera me comenta que Álvarez sigue implicado en el partido y que Sanz le ‘debe’ una, que bien podría saldar en los próximos días con su nombramiento como consejero de Salud y Servicios Sociales. Aunque sólo la cabeza de Sanz conoce los resultados de la quiniela, la legislatura, con escasez de recursos económicos, requiere un perfil como el de Jesús Álvarez porque, realmente, es el colectivo médico el que más problemas puede dar en momentos de recortes y, por otra parte, como sucede en todas las profesiones, perro no muerde perro.
(*) Pdta: Para aquellos que barajábais como opción la marcha del presidente Pedro Sanz a Madrid para ocupar un cargo en el Ministerio de Agricultura después de aquellas palabras de Rajoy en el mitin de Logroño, os puedo confirmar, con rotunidad, que el presidente seguirá en
(**) La imagen de Enrique del Río viene al pelo: en primer plano, Jesús Álvarez y detrás su ‘amortizador’ con José gnacio Nieto, que ocupó el cargo de Pedro Soto un día después de que éste se cepillase al primero.