Siete es el número perfecto en la Biblia, siete son los Pecados Capitales, siete los días de la semana, siete los colores del Arco Iris, siete las vidas del gato, siete los caballos que venían de Bonanza y siete los ‘magníficos’ municipales de Cuca Gamarra, como siete serán los consejeros de Pedro Sanz.
Una vez que ya eran conocidas las caras de los munícipes por las listas electorales, e intuido más o menos el reparto de carteras, lo que más me llama la atención del nuevo gobierno municipal logroñés es que a los ‘siete magníficos’ de Cuca les falta el ‘octavo’. En este sentido, la principal novedad del organigrama es la creación de una Oficina Presupuestaria directamente dependiente de Cuca, que además de las Cuentas municipales se encargará de elaborar un plan financiero y de controlar los gastos: es decir, de cortar el bacalao.
El modelo no es nuevo -José Barea fue el director de
Respecto al equipo, discrepo de mi amigo y compañero
Quien sí entra fuerte es Pedro Sáez Rojo, otro ex director general Gobierno riojano, que, como se esperaba, asume importantes parcelas de gestión, con Urbanismo que, aunque ahora no haya dios que eche un ladrillo en años, tiene la revisión del Plan General y la ‘ecociudad’ sobre la mesa, además de Medio Ambiente y de Promoción Económica.