Recuerdo dos temas en mi carrera profesional en los que la pasión periodística te lleva al extremo. Uno de ellos es conocido, la falsa acusación de la familia de la ex vicepresidenta del Gobierno Arancha Vallejo de supuesta agresión a la madre del clan por informar sobre el arranque de viñedo ilegal, que un juzgado se encargó de archivar. El otro fue el caso de Pancho Campo, que aterrizó en Logroño con el Wine Future el año 2009, con pleno apoyo institucional y de importantes bodegas a las que había colocado en el comité organizador. Pancho Campo atrajo a Logroño, en un evento que incialmente iba para Jerez y cambió de rumbo a última hora a base de pasta, a los más importantes prescriptores del planeta, entre ellos a Robert Parker, quien nunca antes había mostrado interés por los vinos que de este país.
Campo había sido condenado en ausencia (se dio el ‘piro’ antes del juicio) a un año de cárcel en Emiratos Árabes en el año 2003 y estaba en busca y captura por la Interpol por una presunta estafa de un millón de dólares a su ex socia cuando era promotor de conciertos musicales. Cuando pedimos explicaciones por este hecho, meses antes del Wine Future, Campo mintió hasta la saciedad a la organización, pero el Wine Future salió adelante y concluyó con una bochornosa medalla civil a la orden del mérito para Robert Parker.
Pancho, cuya empresa ya había sido condenada anteriormente por impago de un ‘festival’ en Barcelona, siempre sostuvo en Rioja que su problema con la Interpol era consecuencia de un supuesto complot contra él que se había urdido por la extraordinaria influencia y el dinero de su ex socia en Dubai Jackie Wartanian. Nunca conocí a nadie capaz de sostener durante meses una historia tan inverosímil. El periodista Jim Budd, a través de Decanter, publicó el 4 de septiembre e 2009 la orden de detención de la Interpol contra Campo, después de ningún medio nacional, ni regional, hubiera hecho caso a la noticia.
Tras la explosión de Decanter, la presión sobre Pancho Campo -fuentes policiales me confirmaron personalmente que Campo, en contra de lo sostenido, había librado de su extradición a Emiratos por un acuerdo del Consejo de Ministros en el año 2008 así que era plenamente consciente de todo – fue demasiada y se vio obligado a dimitir del Wine Future: fue sustituido tras una cena privada, a la que asistí, días antes del evento tras no poder probar, como aseguraba a quienes le hacían de altavoz, que nunca había sido detenido, o retenido, en España por la orden de arresto internacional de Emiratos y que nunca supo nada del caso hasta hacía unos pocos meses cuando la realidad es que había salido zumbando de Emiratos en el 2003 para evitar el juicio. Es decir, toda la sarta de mentiras con la que sustentaba el supuesto complot, incluidas las veladas amenazas de los mejores y más prestigiosos despachos de abogados, se vino abajo.
Pancho, al menos entonces, contaba con ‘padrinos’ poderosos, el presidente dela Academia Española de Gastronomía, Rafael Ansón, entre otros, y la connivente actitud de la prensa especializada española e internacional, que, aunque ahora aviva la hoguera, hizo oídos sordos en el Wine Future. Jim Budd, como hizo en septiembre del2009, ha vuelto a destapar el escándalo. Campo, a través de su empresa The Wine Academy, ha estado cobrando varios miles de euros por llevar al ex catador de Parker, a Jay Miller, a dar conferencias a diferentes denominaciones de origen españolas, un negocio que encaja difícilmente con quien valora y puntúa los vinos españoles para la publicación más influyente del mundo vitivinícola que, precisamente, predica su independencia.
The Wine Advocated ha despedido a Jay Miller. Ahora, le sustituirá como catador para Wine Advocate para España el británico Neal Martin, hasta hoy responsable de Sudáfrica, Nueva Zelanda y Sauternes, y que, por cierto, debió decir en el 2006 que ni le interesaban ni sabía nada de los vinos españoles. Como me dijo un buen amigo durante el Wine Future, “los vendavales los soporta mejor la flexibilidad del junco que la rigidez del roble y, si quieres ver caer al mentiroso, mejor será que aprendas a ser un poco flexible”.
(Pdta: Con muchos saludos para los incrédulos periodistas y blogueros, como yo mismo, Jim Budd, Gerry Dawes, Harald y Manuel Camblor, que vimos a Pancho Campo pasearse con la cabeza alta por el Wine Future, con el beneplácito de todo el sector vitivinícola, político y de la prensa española).
(*) En la imagen de thegourmetjournal.com, Pancho Campo y Jay Miller en Fenavin
(**) Si quieres consultar un pequeño resumen en español del ‘Campogate’.