Acabamos la serie dedicada al León Dormido con esta entrega fotográfica dedicada a los generadores eólicos que se han adueñado de las vistas orientales que pueden disfrutarse desde esta cumbre. Se trata de los molinos instalados en los últimos años en los montes navarros de Aras, Bargota y Codes. El León Dormido ofrece una posición inmejorable para fotografiarlos, con la posibilidad de sacar los molinos recortados contra el sol del amanecer, como fue mi caso durante la subida a esta cima navarra. No era mi propósito pero la mañana me ofreció en bandeja una gran oportunidad para intentar exprimir las enormes posibilidades creativas de la escena. El resultado es el que están viendo, un paisaje de gigantes que asustaría al mismísimo Don Quijote de la Mancha.