Era el encuentro más decisivo de la jornada. Ambos conjuntos salieron al terreno de juego con el claro objetivo de sumar tres puntos e intentar obrar el milagro de la salvación pero el empate a cero en el Madejski Stadium acabó con cualquier atisbo de esperanza para el Reading y el Queens Park Rangers. A falta de tres jornadas, los dos equipos firmaron la sentencia del descenso y la próxima temporada tendrán que volver a verse las caras en Championship.
El Reading, que ascendió de categoría la pasada campaña, ha sumado cinco victorias, diez empates y veinte derrotas esta temporada. A mediados de marzo el propietario decidió prescindir de Brian McDermott, el hombre que les devolvió la ilusión por volver a jugar en la máxima categoría. No obstante, el conjunto de Reading volverá a la segunda división inglesa de la mano de un entrenador que conoce perfectamente los entresijos de la competición: Nigel Adkins. Con el Southampton, el ex portero logró dos ascensos consecutivos que llevaron al equipo a la Premier League y además, convirtió a los Saints en uno de los conjuntos que mejor fútbol juega de la islas británicas. El hecho de tener a un técnico experimentado como Adkins en el banquillo para afrontar esta nueva andadura y además, contar en sus filas con nueve de los jugadores que el año pasado ganaron la Championship hace pensar que el periplo de los Royals en la segunda categoría será breve.
Muy distinto es el panorama actual del QPR. Durante el mercado de invierno, los dueños del club no dudaron en tirar de talonario para intentar evitar los peores presagios y se gastaron un total de 25 millones de euros. El importante desembolso económico no dio los frutos esperados y ahora, el conjunto de Londres tendrá que hacer frente a las estratosféricas fichas de sus jugadores en la segunda categoría inglesa. Cuatro victorias, trece empates y dieciocho derrotas son el paupérrimo balance de un equipo que antepuso el gasto en fichajes de renombre y se olvidó de formar un equipo. Las desigualdades salariales entre jugadores llegados al QPR en etapas muy distintas han propiciado que la división del vestuario sea una constante durante toda la temporada. Una realidad que ni siquiera el habilidoso y carismático Harry Redknapp ha sabido manejar.
Con el descenso matemático del Reading y del QPR, sólo queda por saber cuál será el tercer equipo que les acompañará a Championship. Wigan, Aston Villa, Newcastle y Sunderland son los candidatos a ocupar esa décimo octava posición de la tabla y, por el momento, el conjunto de Roberto Martínez y el equipo de Paul Lambert son los que están peor posicionados. Ambos se enfrentarán en la última jornada de liga y, salvo sorpresa, todo parece indicar que ese día uno de los dos se convertirá en el tercer descendido.