Los medios de comunicación tenemos modas. Muchas: cuando nos da por algo, somos como la pasarela de Milán. Últimamente, cada vez que algo se mueve en la calle -lo mismo da el 15M que las revueltas árabes- la cuestión es subrayar la importancia de Twitter y las redes sociales en su organización y puesta en marcha.
Lo cual tiene su lado bueno (las redes son realmente importantes y conviene tenerlas en cuenta) pero también engañoso, porque hay quien se queda en la espuma de la superficie: hablando de jóvenes tuiteros y con Blackberry uno olvida que, sobre todo, son jóvenes cabreados y con algún motivo para hacer lo que hacen.
Pero en fin: en ésas estamos cuando estallan los disturbios en Londres. De nuevo, la presencia de las redes sociales ocupa titulares y noticias sin cuento. En larioja.com también, incluyendo, cosa curiosa, iniciativas para atrapar a los saqueadores a través de Twitter.
Cierto que algunos saqueadores se atrapan solos. De 0 a 10, ¿cuál es el grado de tontería necesario para colgar en Twitter una foto tuya de esta guisa?
(La imagen la encontré en ReadWriteWeb)
No sé… ¿un 15?