Primer partido del ‘play off’ de la semifinal de Superliga que enfrenta a Nuchar Eurochamp Murillo y Haro Rioja Voley el sábado 21 de abril. El marcador refleja empate a un set y, en el tercer juego, con un 23-22 a favor del Murillo, el entrenador del Haro Manuel Berdegué ordena el cambio de su jugadora Alonso-Mañero por Araco. Anteriormente, Berdegué ya había cambiado (y deshecho dicho cambio) a Alonso-Mañero por Traspaderne. La reglamentación regula que un jugador puede salir del juego y reingresar una sola vez por set. El Nuchar Eurochamp se percató de este error durante el partido disputado en el polideportivo Federico García Lorca y se lo indicó al anotador, quien informó al segundo árbitro, Antonio Acín, que hizo caso omiso a la reclamación. El set terminó con el resultado de 27-29 a favor del Haro, que acabó ganando el partido por 1-3 y, por consiguiente, el primer punto de la eliminatoria.
Entonces, el entrenador y director deportivo del Murillo, Carlos Arratia, presentó una reclamación al Comité de Competición de la Real Federación Española de Voleibol que fue ratificada el 23 de abril. «Hasta ahora habíamos mantenido un prudente silencio para no enrarecer el ambiente en los partidos que aún teníamos que disputar en Haro, pero debido a la demora que está teniendo la resolución definitiva, y conscientes de que ya no podrán resarcir de ningún modo los perjuicios que hemos sufrido, queremos hacer público lo sucedido», declara Arratia en una nota emitida a los medios de comunicación. Junto a ella se adjunta el acta de la Juez Único del Comité Disciplinario de la RFEVB, M.ª Luisa Pérez Grasa, fechada el 30 de abril y en la que «nos da la razón en la realidad de los hechos y en las consecuencias que estos tuvieron en el resultado del tercer set», añade Carlos Arratia.
Según defiende el Club Voleibol Murillo, de haberse aplicado la sanción durante el partido, se hubieran anulado los puntos logrados por el Haro durante la sustitución ilegal y se hubiese penalizado con un punto adicional en contra a este equipo, lo que hubiera provocado que el conjunto local se adjudicara el tercer set y que el resultado final fuera distinto. «No queremos culpabilizar al Haro, ya que la responsabilidad de agilizar la resolución es del Comité», afirma Arratia, y critica: «No comprendemos cómo se puede dilatar tanto un proceso». A pesar de todo, el club murillense es consciente de que, seguramente, su queja no tendrá mayores consecuencias.
El acta de la Juez Único, que ha abierto un expediente disciplinario, hace constar que, al no ser sancionada la sustitución ilegal ni reflejada ésta en el acta del partido, «para el denunciante delata la clara intencionalidad de saltarse la normativa» por parte del segundo árbitro. Es más, dicho cambio ilegal, posteriormente, incluso fue deshecho en el tanto 27-27, lo que resulta doblemente antirreglamentario. El Murillo, además, reclama que en el segundo set le fue añadido al Haro un punto no anotado sobre la cancha entre los tantos 11-7 y 11-11. Para demostrar estas irregularidades, el equipo de Carlos Arratia ha aportado el vídeo del partido y pide, según informa el Comité, «la sanción que corresponda y, si fuera necesario, la impugnación del partido o de la parte disputada a partir de la sustitución ilegal».
Traslado al Haro
El Comité ha revisado el vídeo y ha observado que «la situación objetiva denunciada, efectivamente, se produjo» y, antes de resolver el expediente, ha dado traslado del mismo al Haro Rioja Voley para que manifieste lo que estime oportuno y ha requerido al anotador de aquel partido, Héctor Gil, que emita un informe de lo ocurrido. Pese a lo enrevesado del caso, los errores parecen claros. «El Haro tiene tiempo de mandar lo que estime oportuno hasta el 7 de mayo, es decir, cuando ya hayan disputado los dos primeros partidos de la final contra Menorca, por lo que los daños producidos son totalmente irreparables», estima Arratia.
Como era de esperar, la situación es bien distinta para el Haro y no van a alegar nada al Comité. «Son errores que se producen durante los partidos y deben quedarse ahí», justifica el presidente del Club Voleibol Haro, Ismael Merino, «pero me extraña la reclamación porque el acta no se firmó bajo protesta, que es lo que se debe hacer si no estás de acuerdo con algo del partido». Merino detalla, además, que la consecuencia de una sustitución mal efectuada es «una amonestación por demora que no tiene castigo en puntos, por lo que el set habría terminado igual». En cuanto al error de puntuación, el presidente jarrero va más allá: «En mi estadística, en un set me salía uno más y en otro, uno menos, por lo que pensé que me había confundido yo».