Lo admito. Traer a la lista esta grabación y hacerlo en un lugar ya tan elevado es consecuencia de una debilidad personal por este grupo que, ciertamente, no concita el mismo nivel de unánimes alabanzas por parte de la crítica que tienen la gran mayoría de los otros protagonistas de este ranking. Pero a mí este CD me parece fantástico y es una de las piezas más queridas de mi colección.

Presentemos primero, para quienes no los conozcan, a los músicos. El pianista Don Pullen y el saxofonista George Adams (dos peculiares talentos tal para cual) son los co-líderes de este cuarteto que completan el contrabajista Cameron Brown y el batería Dannie Richmond. El grupo estuvo en activo desde 1979 hasta 1988, año de la prematura muerte de Richmond. Además, como si una oscura maldición se hubiera cebado con el cuarteto, George Adams falleció en 1992; y Don Pullen en 1995.

La música que durante los años 80 hizo este cuarterto de infravalorados genios es inclasificable, pues en sus grabaciones y en sus siempre excitantes conciertos se mezclaban con total naturalidad elementos que podían ir del soul al free jazz pasando por el blues, el bop y el gospel. Los estilos de Don Pullen y George Adams eran muy similares aunque, lógicamente, cada uno adaptado a las características y a la tradición de sus respectivos instrumentos; pero ambos compartían sin duda la misma pasión, la misma intensidad y la misma libertad a la hora de crear unas improvisaciones a mi juicio siempre estremecedoras, llenas de fuerza y de rabioso lirismo.

Este Breakthrough, grabado el 30 de abril de 1986 creo yo que es la obra cumbre de un grupo que había alcanzado su plena madurez y entró a los estudios de grabación en estado de gracia, con todos sus miembros dispuestos a dar lo mejor de sí mismos como si intuyeran que el trágico fin de la aventura les aguardaba a la vuelta de la esquina.

De los seis cortes de este CD (por cierto, muy difícil de encontrar), si he de elegir uno, me quedo este Song From The Old Country, composición de Don Pullen, que me parece uno de los temas de jazz más hermosos y más deslumbrantes escritos jamás.
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