¿Cómo era el paisaje de la rioja occidental antes de que las vides inundaran sus territorios? ¿Y cómo vivían, qué sentían las personas que sobrevivían e interactuaban en su inclemente medio físico y climático?
Acompañado por Jesús Angel Garcia, de Casa Legarda en Briñas, investigador y comunicador inquieto que vive con pasión por dar a conocer la maravilla antropológica que tenemos en Haro, en Exquisite rioja nos hemos dado la oportunidad de redescubrir el Santuario Celtibérico Jarrero, situado en el meandro que el río Ebro dibuja en su camino hacia el este justo después de recibir al Oja-Tirón.
El emplazamiento natural se vislumbra claramente al salir de Haro por la carretera de Labastida, a la izquierda. Un pequeño promontorio redondeado que recuerda una diminuta pirámide, coronado por una enorme masa rocosa igualmente redondeada, se yergue majestuoso en medio de un entorno de viñedos. De hecho, en el meandro del río, se encuentran viñas nobles de las grandes bodegas del Barrio de la Estación: Vicuana, Perdigón, Tondonia (nombre este toponímico que proviene de Hondón-Dondón-Tondón-Tondonia Leer Más