Fotos by Alfredo Selas
En Exquisite Rioja ya lo sabemos (lo tenemos en cuenta en cada momento) y es que cuando una persona toma una decisión: realizar un viaje, comprar algo, un instante antes sus neuronas cerebrales -las que en realidad deciden- ya habían tomado la decisión.
Hablamos de lo que debieran ser NUEVAS técnicas de neuromarketing y de prestación de servicios para entender qué quieren o gustan las personas como clientes/consumidores; cómo actúa el cerebro a la hora de tener que elegir entre un vino u otro, entre una posible experiencia enoturista de un tipo u otro.
El turismo del vino, los vinos y la gastronomía gustan a la gente como formas exquisitas de vivir experiencias, de disfrutar comiendo y bebiendo; mas, para tener éxito al servir ofertas al respecto, lo que en verdad importa es la gestión y las personas. Teniendo en cuenta esto, hay que ofrecer productos, diseñar propuestas atractivas y diferentes que conciten experiencias y recuerdos sensoriales, personales; y que sean además competitivas y rentables.
¿Qué se puede hacer al respecto? Las agencias de publicidad emplean mucho dinero (invertido por las empresas) haciendo encuestas para recabar opiniones (con respuestas personales y subjetivas del tipo: “Si es que no sé qué vino comprar o dónde ir de escapada un fin de semana”) y luego así diseñar campañas de marketing. Pero fallan en lo más elemental, en el enfoque: no preguntes sobre gustos; mejor indaga sobre el funcionamiento de los procesos sensoriales/mentales de las personas.
En las agencias de publicidad al uso, gustan pasar por alto (no les preocupa descubrir y entender) cómo realmente funcionamos, cómo son nuestros procesos neurofisiológicos. Fijémonos cómo funciona nuestro cerebro: los terminales sensoriales captan los estímulos que constantemente –de un modo orquestado terriblemente complejo que sucede a la velocidad de impulsos eléctricos- son transportados por los neurotransmisores y depositados en las sinapsis, donde son recogidos por sus respectivos receptores para que las neuronas especializadas correspondientes interpreten o “valoren” la información suministrada en base a un binomio elemental: o significa alerta/peligro/evitación o por el contrario placer/relax/aproximación.
O dicho de otra manera, en los asuntos relacionados con servicios exclusivos de ocio (turismo de vino) y productos gourmet (vinos de calidad y gastronomía) la clave está en estimular a las hormonas –llamadas del placer- endorfinas, serotoninas y otras. Lo importante es que los estímulos sensoriales accionen nuestros circuitos de recompensa –en las sinapsis- para desencadenar tal o cual sensación placentera. Hacer ejercicio físico, la risa, practicar sexo, Leer más