Viña Gravonia Crianza 2005
Bodega: R. López de Heredia Viña Tondonia. Haro (La Rioja)
Teléfono: 941310244
Internet: www.lopezdeheredia.com
Zona/D.O.: DOCa Rioja
Tipo de vino: Blanco seco
Cosecha: 2005
Variedades: 100% Viura
Botellas/año: unas 50.000
Precio: alrededor de 11 €
Puntuación: 9.5/10
Para desmentir a aquellos que puedan pensar que con nuestra variedad blanca tradicional no se pueden hacer grandes vinos, les presento hoy un gran clásico de Rioja: Viña Gravonia. Elaborado con uvas del viñedo familiar próximo a la bodega: viña Zaconia, con suelos pobres y con gran cantidad de cantos rodados. Las cepas tienen una edad que ronda los 50 años.
Quién no sabe de la filosofía de esta bodega centenaria R. López de Heredia Viña Tondonia y sus vinos, y a la vista de la cosecha (2005), podría pensar que es una botella que se ha quedado olvidada y que ahora nos quieren colar. Esta sensación puede mantenerse una vez servido en copa, por su color y aroma, ligeramente evolucionados. Para más inri, si el que nos sirve el vino lo conoce, veremos que su temperatura (se recomienda servir sobre 14-16º aunque algunos lo preferimos un “pelín” más fresco) no es la de un blanco al uso.
Pero es que estamos ante un vino que nada tiene que ver con los blancos frescos, afrutados que ahora se llevan. Estamos realmente ante un vino distinto. Pero esa singularidad, esos atributos personales y característicos, es lo que hacen de él un vino fantástico.
Este vino se ha mantenido en madera durante cuatro años acabando su desarrollo en botella. Aparte del largo periodo de crianza y envejecimiento en botella, destacamos de su elaboración llevar a cabo fermentación maloláctica (verdaderamente raro en blancos) y que la clarificación se realiza con el sistema clásico de claras de huevo.
Reconozco que no es un vino para todo el mundo y que a algunos necesitan tiempo para “cogerle el tranquillo”, pero si gusta, gustará muchísimo. Es de esos tesoros que se mantienen intactos año tras año, que con cada copa nos traen gustos y sensaciones que creíamos olvidadas.
Su precio es muy ajustado teniendo en cuenta el gran coste de inmovilizado que soporta. Estamos hablando de la cosecha 2005 y la bodega no saca este vino al mercado hasta que, utilizando los mismos términos que usa la familia López Heredia, está “educado”. Y para estarlo hay que tener al menos el bachillerato completo.
Ya en casa, si se disponen de las condiciones adecuadas, se puede conservar durante varios años sin perder un ápice sus propiedades.
Cata: Color dorado pajizo, mantiene la brillantez debido a los continuos trasiegos. En nariz destacan los aromas a cítricos, especias, almendra,..y, otros, propios de su particular elaboración. En boca, milagrosamente mantiene la frescura y la fruta con matices que le dotan de una gran complejidad. Largo y redondo. Este es un vino que lo mismo puede tomarse con un aperitivo que acompañando cualquier comida, pescado o carne. Reserva un trago para el postre y veras que bien va con dulce. Con chocolate negro es fantástico.
Como apunta Mercedes López Heredia “hoy en día, su gran valor añadido es, además de su capacidad de deleite, su rareza”.
Un clásico vino “fino” (adjetivo que reza en la etiqueta y que mejor define los vinos de esta bodega) que, gracias al empeño de la familia López Heredia, se mantiene.