Tras muchas declaraciones rimbombantes, ajustes incompresibles sobre el déficit del presupuesto 2011 en  nuestra comunidad, donde 40 millones de euros  más o menos parecía no saber de dónde salían, hoy, según las cifras presentadas por nuestro ejecutivo en el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas y publicadas en su página web para el primer trimestre tanto de los ejercicios de 2011 y 2012, nos dejan entrever algunas cuestiones que pueden dar luz sobre lo hecho- muy diferente a los dicho- que tiene como consecuencias las acciones del Gobierno de nuestra Comunidad.

Observemos el siguiente resumen de los datos de ejecución sobre el primer trimestre de 2011 y 2012 del Gobierno de la C.A.R.

Entre las consecuencias que sacamos se observa:

• Que el gasto total sigue creciendo por  muchas declaraciones reincidentes sobre la contención del gasto de la CAR
• La cuestión anterior – que en sí misma no es ni buena ni mala- resulta curiosa cuando observamos los gastos de personal, que por mucho recorte injusto a los funcionarios y muchas declaraciones sobre el recorte de organismos, se contiene en parte pero no deja de crecer.
• Lo mismo ocurre al observar los gastos corrientes, que no casan con lo que se nos dice, ya que estos, al igual que las trasferencias corrientes a instituciones – algunas variopintas- (muchas de ellas las podríamos llamar chequera del Presidente) siguen creciendo.
• Lo único que sí se reduce es aquello que no depende del Gobierno: los gastos financieros que lógicamente caen, no por que baje el nivel de deuda, que sería lo deseable, sino más bien por la caída del Euribor.

Total y a modo de resumen: el gasto corriente no se contiene. Sigue creciendo. En este primer trimestre, 10 millones de €. Y todo ello no significa que nos parezca mal. Sabemos que  gran cantidad de ese gasto contiene gastos de sanidad,  educación,  transferencias a familias con necesidades etc., etc., Pero lo curioso es que se empeñen en decir lo contrario a lo que hacen.

Mi posición, para que quede claro, es que en capítulo 1 y 2 se puede rebajar, pero eso sí,  reduciendo altos cargos y gente que aparece a trabajar con méritos ajenos a la carrera funcionarial y que únicamente los ha adquirido en las diferentes sedes del PP.

Cuando el Gobierno Regional habla de inversiones, de nuevo el criterio que se sigue es decir lo contrario de lo que se hace.

Aquí sí que hay recorte. Parece no importarles el futuro de nuestras dotaciones de capital público ni el mantenimiento de nuestras infraestructuras de capital.

Esto sí garantiza el futuro. Pero da igual: en inversiones este año 2012 la mitad que el año anterior. Y en trasferencias de capital, que muchas de ellas ayudan y modernizan el  tejido empresarial riojano, este año 2012 menos que el anterior.

Y mientras, la deuda de nuestra Comunidad sigue subiendo y ya para el año próximo deberemos el 14% de todo lo que produzcamos.

Nos pueden decir que estos despropósitos pueden ser corregidos en trimestres sucesivos. Puede ser, pero esto ya lo veremos. Con todo, vaya por adelantado que lo fácil para un gobierno es reducir inversiones. Sin embargo esto es lo grave para una región.

Como grave es el desempleo que sufrimos. Me gustaría estudiar y acordar acciones concretas que nos acercaran en el tema de empleo a comunidades vecinas con tasa de desempleo como Navarra, 6 puntos porcentuales menores que las nuestras.

Tenemos igualmente la obligación de hablar sobre la escasa penetración que nuestros productos tienen en el comercio internacional – exportaciones-, todavía muy por debajo de la media de España. O la huida – o no llegada- del capital extranjero al tejido productivo riojano.

Tenemos que hablar de cómo obtenemos rentabilidad social de la cantidad ingente de metros cuadrados de suelo industrial que esperan iniciativas.

Todos debemos apostar por  una salida a esta crisis. Todos somos necesarios a la hora de hablar: empresarios, sindicatos, Gobierno, oposición, todos.