El presidente ha comparecido hoy ante la Cámara para explicar el porqué de la poítica del Gobierno, nuestro proyecto actual-en el que se asientan las decisiones para el futuro- y para pedir colaboración y pactos a las administraciones y a los partidos políticos y apoyo y comprensión a los ciudadanos.

El objetivo central es mantener el plan de consolidación fiscal para apuntalar nuestra solvencia y la estabilidad de los mercados.

La prioridad es desarrollar las principales reformas pendientes: sistema financiero, mercado de trabajo, sistema de pensiones y competitividad para garantizar la cohesión social y el estado de bienestar.

Tanto el objetivo como la prioridad están dentro de la Estrategia de Economía Sostenible y de los acuerdos que tenemos adoptados con el G 20 y en el seno de la UE.

Mientras el Gobierno camina con la sociedad española en esta dura transición de modelo económico y de forma de vida en parte, el PP se regodea en los datos negativos sin ofrecer alternativas, pide elecciones y fomenta la bronca. Es decir, se separa del camino para buscar el atajo. Nada novedoso.

El de hoy está siendo un debate importante. Hasta el momento, el presidente ha discutido con Duran sobre el desarrollo futuro del Estatut comprometido por Zapatero, han acercado posiciones sobre las reformas pendientes y está manteniendo ahora un debate general con Erkoreka sobre las políticas del Gobierno y los futuros acuerdos que necesita el país.