Nadie está libre de Facebook. Ni siquiera quienes no tienen cuenta se pueden librar de aparecer en él. Por eso, quizás la mejor opción sea tener una cuenta, aunque no se use nunca y configurar de la forma más cuidadosa posible la privacidad.
La configuración de privacidad y seguridad de una cuenta de Facebook no es precisamente intuitiva ya que hay muchas opciones y su explicación es algo enrevesada. Así que iremos por partes. ¿Qué es lo que más le preocupa a los usuarios sobre su intimidad en Facebook? Exacto, las fotos. En este post os voy a explicar qué hay que hacer para que la red social nos pida permiso antes de que podamos ser etiquetados en una foto.
-1- Ir a configuración
-2- Biografía y etiquetado
-3- Ir a ‘¿Cómo puedo administrar las etiquetas que otros agregan y las sugerencias de etiquetas?’ y activar
Con este paso tan sencillo, cada vez que alguien te quiera etiquetar en una imagen te saldrá una notificación pidiéndote permiso. Recuerda que eso no significa que esa imagen no esté en Facebook, simplemente evitas que te etiqueten y que se añada a tu biografía.
No olvidemos que no se trata sólo de evitar que el típico amigo que sube las imágenes de la última juerga sin mirarlas consiga que todo el mundo vea el estado en el que terminaste la noche. Va mucho más allá. Como vimos hace tiempo en un post, ya es algo normal que las empresas revisen los perfiles de las cuentas de un posible trabajador antes de contratarle. Es una cuestión de imagen: si no colgarías carteles con esa foto en las calles de tu barrio, tampoco la subas ni permitas que te etiqueten.