EL YAYO ES TONTO
Cuando se aproximaba el apagón analógico, Tasio decretó que su vieja televisión debía morir. Aunque jamás le había dado problemas, cayó rendido ante el fulgor de esas novísimas pantallas de tantas mil pulgadas y prestaciones infinitas que quizá nunca utilizaría, pero adornarían su conversación con las amistades que pasaran por el salón de casa. Para […]