LA CHICA DE AYER
Me topé con ella ayer mismo. Eran poco más de las siete de la tarde, y caminaba delante de mí en dirección al centro. Llevaba una escuetísima minifalda, unos tacones sobre a los que duras penas podía avanzar entre el empedrado y una camiseta de Bershka que se le derramaba alternativamente por el hombro izquierdo […]