Todos pillados
Luis de Guindos es uno de esos tipos que tienen perdida de antemano la batalla contra sí mismos. Se esfuerza por esbozar media sonrisa ante las cámaras, pero cuando entreabre los labios le asoma un colmillo. El gesto más amable que es capaz de cuadrar acaba invariablemente enterrado por la arruga que le surge entra […]