Hoy os hablaré de la importancia de soñar y de tener alicientes para tener una vida llena de nuevos retos.
La clave es estar haciéndose siempre preguntas que nos lleven a cumplir nuestras metas.
Si nos quedamos en vivir el día a día sin metas claras, nuestra vida irá pasando sin más. Pero si somos capaces de trazar nuestro propio camino, sentiremos la satisfacción del cumplimiento de dichas metas.
Preguntas como las siguientes, nos harán replantearnos la vida:
¿Sabes dónde te gustaría estar dentro de 5 años? ¿Qué harías si no tuvieras miedo? ¿Lo que estás haciendo hoy te dirige hacia el cumplimiento de tus metas? ¿Qué cambiarías de tu vida? ¿Agradeces día a día por todo lo que tienes? ¿Quién lleva el control de tu vida? ¿Tu modo de vida actual te gustaría que fuera diferente?
Cuando encontramos realmente sentido a nuestra vida y nos marcamos unas metas, todo lo demás desaparece, dado que la pereza y dejadez ya deben alejarse de nuestras vidas. Debe aparecer nuestra motivación interna para que podamos ir alcanzando, pasito a pasito, cada una de nuestras metas.
Debemos ser responsables con nosotros mismos y asumir el reto, de cara a mantener el entusiasmo para cumplir la meta. Se puede desarrollar la motivación interna y mantenerla. Nuestra actitud debe ser correcta y nuestros pensamientos irán orientados a dicha actitud positiva, dado que tú eres el protagonista de tu vida.
Mi recomendación es que escojas y definas tus propias metas. Tras ésto,tendrás que desarrollar un plan de acción para irte acercando a ellas y recuerda, que nadie puede decirte que no puedes conseguir algo.
Es importante que tras cumplir tus metas, te des una recompensa porque así reforzarás todo el proceso.
“Sigue soñando y no dejes de cumplir tus metas”