Solemos hablar en el blog de Inteligencia Emocional aplicada a toda la sociedad, pero me suelen preguntar, cómo promoverla en los niños.
Hay numerosas estrategias que nos ayudan a conocer, discriminar y gestionar las emociones.
Desde que nacemos, hay miles de estímulos externos que van configurando nuestro mundo emocional.
¿Qué pasos debemos seguir?
* El entorno adulto debe desarrollar su competencia emocional.
Los adultos aquí tenemos gran importancia, dado que somos su ejemplo durante todo el día.
Deberíamos analizar cómo somos y ver el impacto positivo o negativo que estamos teniendo en nuestros hijos.
* Ayudar a desarrollar la competencia emocional del niño.
Debemos enseñar al niño a identificar sus emociones, a reconocer sus experiencias y a fortalecer su identidad y su autoestima.
* Desarrollar entorno emocionalmente inteligente.
En paralelo, trabajaremos sus competencias interpersonales para que así sepa generar relaciones seguras y de confianza.
Fomentando la buena comunicación donde puedan expresarse, será importante.
“Ser empático es ver el mundo a través de los ojos del otro, y no ver nuestro mundo reflejado en sus ojos”.
Carl Rogers.