Seas hombre o mujer seguro que el Día de la Mujer te mueve cosas. A mí me empujó a elaborar este minimapa orientado a dar pistas sobre cómo ambos sexos podemos crecer juntos (lo que incluye, por supuesto, luchar contra la discriminación en la vida cotidiana, tanto externa como la que se da dentro de nuestras cabezas).
Primero, y para empezar, os dejo la pregunta: ¿qué es ser hombre?, ¿qué es ser mujer? Segundo, hay que diferenciar la etiqueta (la categorización, como dirían en estadística) “hombre/mujer”, de las características “masculinas” y “femeninas”, que yo a veces por analogía juguetona nombro como características “yan” (masculinas) y características “yin” (femeninas). Así, como expliqué en el minimapa “orientación sexual y otras aclaraciones”, el porcentaje yin-yan varía en un continuo y podemos encontrar incluso personas dentro de la categoría “mujer” con mucho más porcentaje yan que otras que se etiquetan como “hombre”. Nota: ojo, otra cosa es la orientación del deseo (un “hombre” puede ser 90% yan-10% yin y ser homosexual).
El asunto es que en nuestra sociedad se sobrevaloran tanto las características masculinas, a costa de las femeninas, que nos dirigimos hacia la auto-destrucción de nuestra especie. Encontramos, por una parte, a “hombres con tetas” como Angela Merkel; y por otra, la diferente selección de personal para la tele entre hombres y mujeres (decidme presentadores “feos”… y ahora decidme presentadoras “feas”).
Si valoras menos cuidar a los hijos y hacer la comida que dirigir una empresa o ser profesor de universidad, entonces, ¿qué importancia le das a tu familia y a lo que comes? Hay que restablecer el equilibrio entre las cualidades masculinas (esenciales, por supuesto, también) y la cooperación, el cuidado, la empatía, la interdependencia, la generosidad… Y para ello, tanto hombres como mujeres hemos de hacer las paces con nuestra parte femenina.
Tercero, ser mujer no va asociado con ninguna característica fija. Por tanto, preguntémonos de vez en cuando: ¿actuaría igual si ella fuera un hombre? Por ejemplo, antes de comprar un regalo a un nene, averiguo sus gustos… ya que puede haber niños que le gusten las princesas y niñas que disfruten con los camiones. Cuestionarme (y lo digo como mujer) cómo, sin darme cuenta, me comporto diferente ante una persona por el mero hecho de haberle adjudicado una etiqueta, me parece fundamental.
Y por último, y ya veis que sólo he dado unas breves pinceladas a cosicas para aplicar en el día a día, ¿y si la persona que tengo en frente fuera yo?: ¿y si me dijeran “no” a un trabajo sólo porque puedo quedarme embarazada?, ¿y si me trataran como un objeto?, ¿y si me “protegiesen” más que a mis hermanos?, etc. etc. etc.
No obstante, la educación de las nuevas generaciones es lo fundamental: favorezcamos que germine en ellas el respeto a uno mismo y al otro.
***Mercedes García-Laso, tu psicólogo en Logroño, FB, Tw y Ln | Encuentra el tema que te interesa en índice de todos los Minimapas para Tormentas***