Deshagan juego, señores
El programa de televisión hace una pausa a traición. Sin previo aviso comienzan los anuncios. El primero que aparece en la pantalla, donde el volumen además se ha elevado sin que nadie haya pulsado el mando, repite tres veces un puñado de palabras entre un bombardeo de imágenes luminosas y fragmentadas: entra, entra, entra; mira, […]