Con todos ustedes… ¡las esculturas!
Se hicieron, estuvieron ahí y, si ahora no están, necesariamente tuvieron que llevárselas. Lo que en principio quedó probado mediante sentencia en septiembre del 2011 después de casi nueve meses de declaraciones interesadas, medias verdades e incluso intentos de confundir a la otra parte cuando lo único claro era que el Ayuntamiento había pagado por […]